Los efectos sobre el bienestar emocional que ha provocado la pandemia por covid son evidentes.
Según The Lancet, esta pandemia de salud mental puede costarle a la economía global más de 5.000 millones de euros en 2030 y generar pérdidas millonarias motivadas por las bajas laborales, el presentismo, el bajo rendimiento y otros costes económicos asociados.
Por este motivo, cada vez son más las empresas que apuestan por priorizar la salud mental y el bienestar emocional en sus organizaciones. De hecho, si quieres saber más de cómo tener procesos de selección saludables te invitamos a leer la guía que realizamos junto a Psonríe ‘El bienestar emocional en el trabajo y el employer branding’.
Por otra parte, según el estudio “Emotional Intelligence” del Instituto Capgemini, los trabajadores con una alta inteligencia emocional aumentan un 20% la productividad empresarial.
Esta capacidad para reconocer emociones propias y ajenas mejora la toma de decisiones, protege del estrés y mejora el rendimiento laboral y el estado de ánimo del trabajador.
Entonces, sí, es verdad, el bienestar emocional de los empleados afecta en la productividad laboral de la organización.